Madrid/Bruselas (EuroEFE).- El conjunto de siete olmos centenarios situados en la localidad extremeña de Cabeza del Buey se encuentra en tercera posición del certamen "Árbol Europeo del Año" tras la primera ronda de votaciones, por detrás del "Árbol del Silbador" portugués y el ruso "Viejo de los Bosques de Belgorod".
La Environmental Partnership Association (EPA), organizadora del concurso, informó de que más de 140.00 personas ya han votado por sus árboles europeos favoritos durante la primera fase del concurso, cuyos resultados provisionales fueron publicados el 23 de febrero.
El certamen "Árbol Europeo del Año" cumple su tercera edición y premia a aquellos ejemplares con los que las personas han establecido especiales relaciones afectivas con el objetivo de otorgar un reconocimiento a aquellos árboles que por diversas características son merecedores del respeto y admiración de la comunidad.
Supervivientes de la grafiosis
España está representada por un conjunto de siete ejemplares pacenses de la especie Ulmus minor, un grupo de olmos históricos que ha resistido el embate de la grafiosis, una enfermedad que ha matado a más de un millón de árboles en España.
A pesar del peligro de la enfermedad, este grupo de ejemplares y continúa presidiendo el entorno de la ermita del santuario de Nuestra Señora de Belén.
Además, su valor histórico y sentimental está vinculado con la romería de esta misma ermita, ya que tradicionalmente los asistentes a este festejo popular que se celebra cada 27 de septiembre desde 1650, han encontrado descanso bajo su sombra.
Los siete olmos, que fueron declarados árboles singulares por la junta de Extremadura en 2005, consiguieron imponerse con 11.711 votos en la votación popular nacional al resto de candidatos.
Los resultados definitivos a nivel europeo se harán públicos en la ceremonia de entrega de premios en Bruselas el 21 de marzo y no se publicarán nuevos resultados provisionales.
Los otros finalistas son: el Tilo de la Vieja Nación (Bélgica), las Sequoias de Yuchbunar (Bulgaria), el platano de sombra conocido como "el símbolo del Tristeno" (Croacia), el Nogal Negro de Kvasice (República Checa), el castaño apodado "el sobreviviente de Zengővárkony" (Hungría) , la Picea de las Brujas (Lituania) , el Chopo Helena (Polonia) , el Roble de Cajvana (Rumanía) , el Manzano de Bošáca (Eslovaquía) y el Roble de Gilwell (Reino Unido) .
Un roble polaco, ganador de 2017
En la edición del año pasado, un gigantesco ejemplar de Pino Laricio de más de 43 metros de altura, 5 metros de perímetro y alrededor de 400 años de edad bautizado como "Aprisquillo", fue el representante español del certamen.
El mencionado pino, ubicado en el municipio abulense de La Adrada, quedó en décima posición entre quince aspirantes.
Jozef, un roble polaco de 650 años de edad, que sirvió de refugio a una familia judía durante la Segunda Guerra Mundial, fue reconocido como Árbol Europeo del Año 2017.
Los siete olmos españoles candidatos este año pertenecen a La Serena, uno de los enclaves extremeños de la Red Natura 2000, la agrupación de espacios protegidos de la Unión Europea en la que se inscribe esta extensión de 3.000 kilómetros.
Este territorio protegido alberga numerosos espacios protegidos: tres ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) en el Embalse de Orellana, la Sierra de la Moraleja y La Serena-Sierra de Tiros; una Zona Húmeda de Importancia Internacional en el Embalse de Orellana, además de varios LIC (lugares de interés Comunitario).
El valor histórico de este conjunto de olmos centenarios está vinculado con la romería de Nuestra Señora de Belén ya que tradicionalmente los asistentes a este festejo popular que se celebra cada 27 de septiembre desde 1650, han encontrado descanso bajo su sombra. euroefe.
