(EUROPA PRESS) - Un nuevo estudio encargado por la Comisión del Océano Mundial ha revelado hasta qué punto mitigan el cambio climático los organismos vivos de la alta mar.
Absorben y almacenan 500 millones de toneladas de carbono cada año, lo que equivale a 1.500 millones de toneladas de dióxido de carbono atmosférico.
El trabajo identifica 15 servicios ecosistémicos con un valor directo para los seres humanos, desde servicios de 'aprovisionamiento', como por ejemplo los recursos genéticos y las materias primas, pasando por servicios 'de regulación', como la purificación del aire y el control biológico, hasta servicios 'de hábitat', como son el mantenimiento del ciclo biológico y la protección de las reservas genéticas.
La Comisión Océano Mundial encargó el estudio para profundizar su trabajo sobre el papel de la alta mar en el estado de salud de todo el océano mundial y sobre el valor de los muchos servicios que ésta proporciona.
El copresidente de la Comisión, Trevor Manuel, ha señalado que estos datos permiten "ver y evaluar de forma mucho más clara lo que podríamos perder si no tomamos medidas para proteger la alta mar y gobernarla eficazmente con el fin de proteger servicios ecosistémicos vitales".
Según ha indicado, esta nueva información permite guiar el trabajo de la Comisión, que el próximo 24 de junio publicará un informe y una serie de propuestas de acción para frenar el declive del océano y restablecer su estado de salud.
El estudio describe los principales mecanismos el océano para almacenar y fijar el carbono atmosférico, y calcula y atribuye un valor económico de entre 74.000 y 222.000 millones de dólares anuales a la función de secuestro de carbono que desempeña la alta mar.
CADA AÑO SE PESCAN 10 MILLONES DE TONELADAS DE PESCADO
En referencia a la pesca, el estudio identifica que cada año se pescan en alta mar casi 10 millones de toneladas de pescado, generando más de 16.000 millones de dólares de valor de desembarque. Pero los autores destacan que el valor real de la alta mar para el total de poblaciones de peces del océano es en realidad mucho mayor, visto el grado de 'compartición' e interacción entre la alta mar y las aguas jurisdiccionales (zonas económicas exclusivas, o ZEE) de los países costeros.
Del mismo modo, destaca que el 42 por ciento de las especies comercialmente importantes a escala mundial analizadas se captura tanto en alta mar como en las zonas marítimas costeras y menos del 1 por ciento de las especies se pescan exclusivamente en alta mar. Las poblaciones de peces 'transzonales' y altamente migratorias, que están presentes tanto en alta mar como en las ZEE, suponen el 67 por ciento de las capturas totales mundiales y el 72 por ciento del valor total de los desembarques asociados a la pesca comercial mundial.
Además, el estudio considera que el papel de la alta mar a la hora de contribuir a la supervivencia y la regeneración de las poblaciones de peces costeras es tan importante que existen argumentos sólidos para prohibir todo tipo de pesca en alta mar. Los autores sostienen que una pesca mal gestionada puede influir negativamente en el suministro de otros servicios ecosistémicos, como por ejemplo en la captura y el almacenamiento de carbono, y hacen un llamamiento a la mejora de la gobernanza de las zonas de alta mar.