miércoles, 19 de febrero de 2014

Meteorito se desintegra en la atmósfera y conmociona Argentina


18 de febrero. Un fuerte estruendo atribuido a un meteorito conmocionó hoy a los habitantes de la central provincia argentina de Santa Fe, informaron a Efe fuentes de los servicios de emergencia.

"Se sintió un fuerte ruido, un estruendo que generó miedo en algunos de nuestros vecinos y que se escuchó también en otras localidades cercanas", dijo el jefe de Bomberos voluntarios de la localidad santafesina de Armstrong, Jorge de Grande.

"Se trata de materia interplanetaria, un bólido de gran tamaño que se ha desintegrado en la atmósfera y provocó la vibración" en una zona ubicada unos 400 kilómetros al oeste de Buenos Aires, explicó el director del Observatorio Astronómico de Santa Fe, Jorge Coghlan.

"Sucedió a unos 70 kilómetros de altura, es una roca del espacio que se va frenando en la atmósfera; por eso, en un radio tan amplio, de más de 40 kilómetros, fue oído, porque sucedió a gran altura", señaló a medios locales.

Por el momento, no se ha informado de heridos, de daños materiales ni del hallazgo de material procedente del espacio, señaló De Grande.

El pasado abril habitantes de Santiago del Estero y de otras provincias del norte argentino aseguraron haber visto en la madrugada en el cielo el paso de lo que describieron como un meteoro de luz muy intensa. 

Fuente EFE
Publicado
http://www.caracol.com.co/noticias/tecnologia/fuerte-estruendo-atribuido-a-un-meteorito-conmociona-provincia-argentina/20140218/nota/2086882.aspx

Los movimientos de alas y aletas siguen un mismo principio universal


La mayoría de los animales que vuelan o nadan doblan sus alas o aletas en proporciones geométricas similares y en ángulos similares, según un estudio. Este mismo principio universal, que se aplica a criaturas tan diversas como las polillas y los tiburones, ofrece lecciones para los investigadores en el diseño de vehículos acuáticos y aéreos.

Según se explica en el artículo, publicado en 'Nature Communications', el desarrollo de máquinas aéreas basado en la aerodinámica de las alas flexibles se ve obstaculizado por la falta de información acerca de cómo las aves logran la estabilidad y el control.

La opinión científica ha variado a lo largo de la historia acerca de si la flexibilidad de las alas ayuda u obstaculiza la producción de empuje en el caso de un avión. Por ello, el científico John Costello y su equipo decidieron estudiar cómo se deforman las alas de los animales.

Ya se sospechaba que los efectos de flexión eran similares en las alas y en las aletas utilizadas para la propulsión en el agua, pero, con este trabajo de demostró que ambas siguen el mismo principio.

Los investigadores revisaron sitios web de vídeo como YouTube y Vimeo con imágenes de especies que van desde moscas de la fruta a los murciélagos y de los moluscos a las ballenas jorobadas. Se trata de una gran diversidad de formas y estructuras propulsoras --membranas finas, alas de plumas, colas de ballena gruesas y pesadas-- entre las que los autores encontraron poca variación: "se pueden contar con los dedos de una mano", ha destacado Costello.

Concretamente, a través de 59 especies se ha calculado que la distancia desde el punto donde se inicia la flexión hasta la base del ala tiende a ser alrededor de dos tercios de la longitud total del ala, y el ángulo máximo de flexión fue confinados dentro de la gama de entre 15 a 38 grados.

Por tanto, los científicos llegaron a la conclusión que, animales con muy diferentes orígenes evolutivos, han encontrado la misma solución a un problema común. "Su evolución ha sido gobernada por las leyes físicas que determinan la interacción de fluidos", ha indicado dice Costello. "No importa si se originó a partir de gatear, caminar o saltar, una vez que se adaptaron a un fluido, se desarrollaron dentro de un sistema determinado por un conjunto común de límites", ha añadido.

Lo que es más sorprendente es que todos estos animales han convergido en lo que parece ser una ley universal, a pesar de tener cuerpos con diferentes anatomías y fisiología. "El ala comparativamente débil de un insecto se deforma en la misma medida en vuelo como lo hace el poderoso golpe de la cola carnosa de una ballena asesina", ha apuntado el autor.

Publicado
http://www.europapress.es/ciencia/noticia-movimientos-alas-aletas-siguen-mismo-principio-universal-20140219144557.html

Identifican el primer biomarcador de la depresión


Un equipo de investigadores de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido, ha identificado el primer biomarcador, una señal biológica, de depresión mayor o clínica. Estos expertos argumentan que esto podría ayudar a identificar a los niños en particular que corren mayor riesgo de desarrollar la enfermedad y proporcionar tratamiento en una etapa anterior.


Los adolescentes varones que presentan una combinación de síntomas depresivos y niveles elevados de la hormona del estrés cortisol tienen hasta 14 veces más probabilidades de desarrollar una depresión mayor que los que no muestran estos rasgo, según su estudio, financiado por el Wellcome Trust, en Reino Unido, y publicado este lunes en 'Proceedings of the National Academy of Sciences'.

Mayor o clínica, la depresión es un problema de salud mental debilitante que afecta a una de cada seis personas en algún momento de sus vidas. Sin embargo, hasta ahora no ha habido biomarcadores para la depresión mayor, algo que se cree que se debe, en parte, a que tanto las causas como los síntomas pueden ser muy variados.

"La depresión es una enfermedad terrible que afecta a unos diez millones de personas en Reino Unido en algún momento de sus vidas --señala el director del estudio, Ian Goodyer, profesor en la Universidad de Cambridge--. Ahora tenemos una manera muy real de identificar a los adolescentes con mayor probabilidad de desarrollar depresión clínica, lo que ayudará a orientar estratégicamente prevenciones e intervenciones en estos individuos y ayudar a reducir su riesgo de episodios graves de depresión y sus consecuencias en la vida adulta".

Según el primer autor del trabajo, Matthew Owens, de la Universidad de Cambridge, este nuevo biomarcador sugiere que se puede ofrecer un enfoque más personalizado para los niños en riesgo de depresión. "Esto podría ser una forma muy necesaria de reducir el número de personas que sufren depresión, y, en particular, esperamos detener el riesgo en un momento en que se ha producido una creciente tasa de suicidio entre los adolescentes y los hombres jóvenes", afirma.

Los investigadores midieron los niveles de cortisol en la saliva a partir de dos grandes cohortes independientes de adolescentes. El primer grupo estaba formado por 660 adolescentes, de los que se tomaron cuatro muestras tempranas por la mañana en días de colegio durante una semana y luego otra vez 12 meses más tarde, de forma que los expertos vieron que los niveles de cortisol se mantuvieron estables durante un año en la población en general en los niños y niñas.

Un segundo grupo, formado por 1.198 adolescentes, dieron muestras tempranas de saliva por la mañana durante tres días escolares. Gracias a autoinformes sobre los síntomas actuales de depresión recogidos longitudinalmente en los 12 meses y la combinación de éstos con los hallazgos de cortisol, el profesor Goodyer y sus colegas dividieron a los adolescentes de la primera cohorte en cuatro subgrupos distintos, desde aquellos con niveles normales de cortisol por la mañana y bajos síntomas de depresión en el tiempo (grupo 1) hasta jóvenes con niveles elevados de cortisol por la mañana y altos síntomas de la depresión en el tiempo (grupo 4) .

Este último grupo con elevados niveles de cortisol y síntomas de depresión estaba compuesto por uno de cada seis adolescentes del estudio (17 por ciento). El equipo de investigación replicó exactamente estos subgrupos utilizando la segunda cohorte y, como las dos cohortes dieron resultados idénticos, el profesor Goodyer y sus colegas combinaron y estudiaron toda la muestra de 1.858 adolescentes para ver su probabilidad de desarrollar depresión mayor clínica y otros trastornos psiquiátricos durante un seguimiento de 12 a 36 meses después.

Los sujetos en el grupo 4 fueron en promedio siete veces más propensos que los del grupo 1 y de dos a tres veces con más posibilidades que los otros dos grupos a desarrollar depresión clínica. Un análisis más detallado reveló que los niños en el grupo 4 fueron 14 veces más propensos a sufrir depresión mayor que aquellos en el grupo 1 y tenían entre dos a cuatro veces más posibilidades de desarrollar la condición que cualquiera de los otros dos grupos.

Po otro lado, las chicas en el grupo 4 sólo tenían cuatro veces más probabilidades que las del grupo 1 de desarrollar una depresión mayor pero no eran más propensas a desarrollar la condición que las que tenían cortisol matutino elevado o síntomas de depresión por sí solos, unos hallazgos que sugieren la existencia de diferencias de género en el desarrollo de la depresión.

Con el fin de demostrar que la combinación de altos niveles de cortisol y síntomas depresivos era un biomarcador para un tipo particular de depresión, los científicos necesitaban mostrar que los adolescentes en el grupo 4 eran diferentes de los de los otros grupos. Lo hicieron mediante una prueba de memoria completa en la primera cohorte que consiste en episodios de grabación sistemáticamente recogidos de la vida de una persona (conocida como memoria autobiográfica).

Los niños y las niñas en el grupo 4 fueron particularmente pobres en recordar sistemáticamente los recuerdos autobiográficos específicos de más de treinta casos de ejemplos en los diferentes ámbitos sociales y personales. Por ejemplo, cuando se les presentó la expresión 'día de campo', la mayoría de los adolescentes relató de forma bastante detallada cuando iban a un picnic, mientras los individuos del grupo 4 tendieron a dar muy poca información y más.

Esto apoya la evidencia de la literatura científica que sugiere que el cortisol alto actúa para suprimir la recuperación de la memoria autobiográfica. Los investigadores esperan que tener un biomarcador fácilmente medible, en este caso, cortisol elevado en síntomas depresivos, permitirá a los servicios de atención primaria identificar a los niños con alto riesgo y considerar nuevas estrategias públicas de salud mental para este subgrupo en la comunidad.

Publicado
http://www.infosalus.com/salud-bienestar/noticia-identifican-primer-biomarcador-depresion-20140218100133.html